martes, 15 de diciembre de 2009

ANGUS YOUNG

Nunca nadie va entender lo que yo sentía por Angus Young.
La primera ves que lo vi se esforzó para llegar a mí, y con sus ojitos me pidió que lo ayude.
Lo agarré y lo puse entre mis manos, quererlo me costó menos de lo que cuesta quererse a uno mismo.
Angus era muy pequeño, tenía la mitad del tamaño que la de sus hermanitos, todo indicaba que estaba enfermo.
La gente me decía que no me encariñe con él, pero yo no podía quedarme sin hacer nada, el me necesitaba y yo sola lo sabía.
Finalmente lo lleve a la veterinaria el problema eran los parásitos, lo estaban consumiendo por dentro.
Con paciencia y remedios logré que los bichos se alejaran de él, su ánimo mejoro e incluso empezó a comer. De noche lloraba y me despertaba, no me molestaba cuidarlo. Verlo jugar me dibujó una sonrisa inmensa en mi rostro, ¡mordía! como cualquier cachorro juguetón.
Cuando ya se encontraba estabilizado, empezó a toser, el síntoma ya no me gustaba. Mi presentimiento fue cierto: Angus tenía Moquillo.
El Moquillo es un virus el cual en la mayoría de los casos es mortal. Hay sólo un 10% que logran salvarse, mi pregunta es cuántas probabilidades existe de que Angus sea parte de ese porcentaje. Le compré un antibiótico, el cual no cura el virus pero le puede calmar la tos. Le cuesta respirar, duerme y no como nada en todo el día.
No puedo parar de mirarlo y pensar en que yo le prometí que lo iba a salvar…se que la culpa no es mía pero de todos modos me tortura la idea de que sufra.
Las personas suelen no entender mi relación incondicional con los perros, y ellos para mí son tan parte de mi vida como los humanos.
Angus es un cachorrito frágil e inocente, sólo pretende sobrevivir y pareciera que es mucho pedir.
En un mundo tan limitado yo lo encontré, ahora solo quiero salvarlo.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Como cortar (separarse) pacíficamente

Terminar una relación amorosa es un proceso complejo, el cual puede resultar doloroso en mayor o menor medida según el comportamiento de las partes. Separarse de una persona con la que estableciste ciertos códigos, compartiste momentos y te conociste íntimamente no es fácil para nadie. Sólo una persona exitista o fría puede pretender salir totalmente ileso de un corte. La realidad es que no hay instrucciones seguras de cómo cortar pacíficamente, sólo se cuenta con ciertas reglas de respeto que uno puede elegir cumplir o no. Estas reglas van a depender de dos cosas: una, del poder de decisión que tiene la persona que menos le importa el otro; dos, la actitud y posición que tome el otro frente a las decisiones que va tomar aquella persona que esta en superioridad.

La persona que menos le importa:

La persona que menos le importa, es la que menos le afecta abandonar la relación. En este caso no importa quien haya tenido la decisión de dejar al otro, importa las razones por las que se ha tomado la elección de cortar.
Hay ciertas cosas que deberá evitar realizar y costumbres que deberá abandonar para no lastimar al otro.

1)No llamarlo para ver como está, ya que esto lo confundiría.
2)No buscarlo por aburrimiento.
3)No estar con otra persona enfrente del otro, porque lo lastimaría o peor aún le haría creer que es intencional.
4)No concurrir a los mismos lugares que el otro.
5)No hablar con los amigos/as del otro sobre la relación que tenían o los sentimientos actuales.

La personas que más le importa:

La persona que más le importa el otro, es la que no quiere alejarse de la otra persona y mucho menos terminar la relación. En este caso no importa las razones que tenga para no querer separarse, importa la voluntad que tenga para aceptarlo.
Hay ciertas las actitudes que debe tomar hacia el otro, pero sobre todas las cosas hacia uno mismo.

1) Llorar y hablarlo con las personas que considera más cercanas.
2) Realizar el duelo correspondiente
3) Evitar actitudes como no comer, fumar y tomar alcohol.
4) No buscar desesperadamente una persona que llene el vacío que dejó el/la otro/a.
5) No martirizarse con las canciones que escuchaban juntos o leyendo cartas viejas.
6) No averiguar de las actividades diarias, estado civil, palabras del otro.
7) No ponerse en situación de victima frente al otro.
8) No llamar al otro llorando pidiendo que vuelva, ni mandarle cartas o regalos.
9) En lo posible no frecuentar los mismo lugares que el otro.
10)Entender que no funcionó y no quemarse el cerebro que tubiera que haber hecho para que funcione.

Todas estas instrucciones son fáciles de comprender si las miramos desde una posición objetiva, lejos de nuestros zapatos. Cuando se está en el momento del hecho y es uno el único dueño de sus actos, es difícil tener la voluntad y la inteligencia de realizar lo que se debe. Los sentimientos, emociones y personalidad son los distintos atravesamientos que influyen a la hora de tomar decisiones. A lo que llaman mantener una postura políticamente correcta, no existe cuando se trata de relaciones; sean éstas físicas, espírituales, religiosas o imaginarias.

Como quitar un anillo atascado en un dedo

Ramón y Juana tienen 27 años, están de novios hace cinco años y llevan conviviendo dos. Ramón decide que es el momento perfecto para casarse con Juana, ya que su relación es increíble y su estabilidad económica se los permite. Ramón la sorprende a Juana en la salida del trabajo y junto con un anillo de diamantes “Tiffany” le propone casamiento.
Juana entusiasmada acepta comprometerse pero le pone una condición: que su mejor amiga Charo sea la madrina del casamiento. El problema con la amiga de Juana es que Ramón no la puedo ni ver, prácticamente no puede estar en el mismo lugar que ella. La razón por la cual a Ramón no le gusta Charo es por su vulgar y agresiva forma de decir las cosas. Pero a pesar de esto, sabe que es buena persona por lo que aprueba la regla que propone Juana.
Al enterarse Charo, se pone muy contenta y ofrece comprar las alianzas como regalo de casamiento. Ramón esta de acuerdo a pesar de que esto no era parte del trato que había realizado con su mujer. Charo, al ser soltera, se encuentra desesperada por saber quien será el futuro padrino. El padrino resulta ser Felipe, un primo de Ramón. Charo no conoce a Felipe, esto sólo genera el crecimiento de sus expectativas.
Luego de 6 meses de planificación y organización, faltan dos semanas para el casamiento y tanto Juana, como Ramón están ansiosos por ver las alianzas. Charo les pide paciencia ya que su deseo más grande es sorprenderlos en la ceremonia.
Faltan sólo tres días para el casamiento y se realiza un ensayo dónde participan los novios y los padrinos. Charo se enamora a primera vista de Felipe y se propone conquistarlo durante los días restantes. Felipe, responde positivamente a los encantos de Charo; su forma de dirigirse a los demás, a diferencia de Ramón, le parece auténtica y excitante.
La noche antes del casamiento, Felipe la invita a salir a Charo. Salen a comer y a tomar un helado. Cuando Felipe la acompaña a la puerta de la casa, Charo le pregunta si se pueden probar los anillos para ver como quedan puestos. Felipe accede a probarse el anillo, el cual le queda esplendido y Charo queda estupefacta mirando la mano de su príncipe azul. Mientras observa la mirada de Felipe, se lo prueba ella sin siquiera mirar sus dedos, lo que provocó que se lo ponga en el dedo gordo.
Felipe se da cuenta de semejante torpeza y se ríe al mostrarle; Charo se da cuenta y se pone roja. Apresuradamente se da vuelta y abre la puerta de su casa, la cual queda entornada mientras lo saluda. Al cerrar la puerta se agarra el dedo gordo con el anillo puesto. Felipe escucha el ruido y vuelve hacia la puerta para ayudarla, entran dentro de la casa para buscar hielo. Después de un rato de hielo en el dedo, el dolor se calma pero el color piel se transforma en violeta. Felipe decide llevarla al hospital, los doctores no se esfuerzan en entender la turbia historia del anillo atascado en el dedo. Por el contrario lo único que intentan es evitar cortarle el dedo.
Mientras Charo se pelea con los médicos, Felipe lo llama a Ramón para contarle lo sucedido con el anillo. Ramón se vuelve loco ya que lo último que quiere es casarse con la inoperante de Charo. Promete no contarle nada a Juana para no preocuparla, a cambio le pide a Felipe que el anillo llegue sano y salvo a la ceremonia.
Los médicos llegan a la conclusión de cortarle el anillo con un serrucho, corriendo el riesgo de quitarle el dedo. Hablan con Felipe y le explican la necesidad de la autorización de Charo para realizar la “operación serrucho”. Felipe lo llama nuevamente a Ramón para pedirle una opinión y Ramón grita: “¡Pero si accede a la operación están atentando contra la salud del anillo!” y luego pregunta: “¿Quién me asegura que el anillo pueda arreglarse? Felipe tiene ganas de pegarle a Ramón pero no cree que Charo se haye en una situación en la que pueda ser defendida. De todas formas opta por cortar el teléfono y solucionarlo sin la ayuda de Ramón.
Felipe le explica a Charo,lo más pausado posible, la única solución acerca del anillo atascado en el dedo. Charo a pesar de no tener alternativa, se somete a la operación serrucho.
Empieza el Civil. Juana y Ramón, se encuentran en el centro de la sala frente al juez; en sus costados: Felipe y Charo. El padre los declara marido y mujer, llega el momento de ponerse las alianzas. Felipe le acerca una caja pequeña roja, Ramón la abre y encuentra las alianzas en perfectas condiciones. Ahora Ramón se le acerca a Felipe y le confiesa: “te debo una”, a lo que Felipe le contesta: “no te preocupes cuando me case con Charo, me lo devolves con el dedo a Juana”

Como entender la molestia cotidiana

La molestia cotidiana son todas aquellas situaciones que vive el ser humano siendo éste victima del fastidio, disgusto, hostigo y daño causado por terceros o por uno mismo.
Existen cuatro lugares dónde se los puede molestar a los individuos: primero, en el hogar; segundo, en el trabajo; tercero, en los espacios/transportes públicos; y finalmente, en la vida.
Circunstancias en el hogar:
La aspiradora, la maquina de cortar el pasto, las obras, un domingo a la mañana luego de una noche larga.
Los mosquitos, cuando estás comiendo un asado, tomando sol o durmiendo.
Gritos de una madre, cuando no se hizo lo que había que hacer.
Las preguntas de los padres, al otro día de salir con amigas/os.
La famosa frase “Es tu deber”, cuando no te felicitan por hacer algo bien.
Favores como: limpiar la pileta, ir al supermercado, etc. cuando se envidia el ocio ajeno.
La orden “apaga la luz que no nos sobra el dinero”, cuando todavía ni siquiera abandonaste el sector donde estabas utilizando la luz.
Los pequeños ruidos que se escuchan cuando estás solo en casa: la heladera que se prende, los sonidos de la madera del piso, el lavarropas, etc.
El queso mantecoso convertido en plástico, cuando lo vas a buscar a la heladera y no lo guardaron bien.
La falta de un ingrediente, cuando ya comenzaste a cocinar la torta.
El miedo y los nervios, cuando te estás bañando y crees que hay alguien atrás de la cortina.
El extractor del baño, cuando alguien se equivoca lo prende y aparte lo deja prendido por el resto del día.
La falta de jabón, crema de enjuague o shampoo, cuando ya estas bajo la ducha.
La poderosa imaginación, cuando te despiertas en la mitad de la noche, ves la sombra de una persona y en realidad es un perchero.
Circunstancias en la vida:
El “yo te dije que…”, cuando ya lo hiciste.
El tono con que pronuncian tu nombre, cuando hiciste algo mal.
La mirada de arriba a abajo, cuando te miran la indumentaria y no expresan opinión.
El no te miro no te escucho, cuando le estás hablando a alguien y no mira a los ojos.
El hablar, cuando nadie te presta atención
La ausencia de hamburguesas, cuando vas a MC Donalds a las 6 de la mañana y te ofrecen un tostado.
El robo disimulado, cuando ya habías visto en la bandeja del mozo el bocado que te ibas a comer y lo agarra el otro.
La poca comprensión del hombre, cuando a una mujer le viene el período.
El poco respeto de la mujer, cuando los hombres quieren ver un partido de fútbol.
La luz de la nafta encendida, cuando te subís al auto y te das cuenta que otra vez te dejó tu familia o tu marido, lidiando con la extensa fila de la estación de servicio.
Circunstancias en el trabajo:
Los pacifistas, cuando estás estresado.
Los estresados, cuando estresan al otro.
La culpa, cuando no la tuviste.
La indiferencia, con respecto a una propuesta.
La soberbia, cuando se esta en una mejor posición que otro.
El equipo, cuando no funciona.
La competencia, cuando te consideran parte de ésta.
La falta de ortografía, cuando ya enviaste el mail.
Circunstancias en los espacios/transportes públicos:
Los ventajeros, cuando te quitan el lugar donde habías planeado estacionar el auto.
Los perezosos, cuando en el colectivo no ceden lugar a aquellas personas adultas o embarazadas.
El que se saca los mocos, cuando el semáforo está en rojo.
El que fuma, cuando estás comiendo.
Los paseadores de perros, cuando dejan las necesidades del perro en la calle.
Todas estas circunstancias hacen el día a día de una persona. Se pueden enfrentar a través de dos caminos: uno, quejarse de manera crónica; o dos, aprender de todas aquellas cosas que molestan para luego no hacerlas. Si elegís el camino numero uno, estarás peleando por cambiar a los demás; si elegís el camino numero dos, estarás cambiándote a ti misma/o para mejor.

Como evitar desastres en año nuevo

La noche de año nuevo, ¿Es la última noche del año que está terminando o el límite entre éste y el próximo? La redundante pregunta parte de la abismal diferencia entre una y otra. No es lo mismo evitar el desastre prácticamente controlado que existe antes de las 00 horas del 2009; que prevenir el desastre universal de las 00 horas en adelante de un 2010 ¿cierto? Presentemos las 2 opciones: la primera en modelo familiar; la segunda, en modelo amistad.
Al modelo familiar ¿lo podremos atribuir al género clásico? Donde la noche de año nuevo en la mayoría de los casos depende de la relación del abuelo y la tía. Supongamos que la velada empieza en la galería de una casa, con las mágicas manos de María, la dueña del hogar, encendiendo las velas que están sobre la mesa. Se escucha el timbre y detrás de éste el ladrido de Patán. María le grita a su hija: “Abrí la puerta Lucía, y dale el tranquilizante al perro antes que te olvides”. Lucía abre la puerta y la familia Ingalls comienza a entrar: primero, la pareja de los ancianos: abuelo Mario y abuela Nene; luego, los dos hermanos de María con sus respectivas familias; por último, entra la hermana de la abuela Nene: tía Nidia. Dentro de este escenario ¿quién será el/la encargado/a de prevenir el desastre masificado? O mejor dicho ¿a quién habría que darle el calmante, a Patán o algún integrante de la familia? Son las 10 p.m. la cena esta servida, la tía Nidia comienza hablar. El abuelo Mario, no disimula las miradas terroríficas hacia abuela Nene, haciéndola responsable del comportamiento de tía Nidia. Lucía al visualizar la situación de alta tensión, decide sacar la lista que había realizado en caso de prever un futuro conflicto similar al del año anterior. La primera recomendación es “no darle la droga al perro”, ya que Lucía considera detestable la idea de “tranquilizar” a su perro, prefiere tranquilizar a su abuelo. La segunda recomendación es “en caso de notar al abuelo Mario gruñón con la tía Nidia, evitar la tentación de meterle el tranquilizante en su vaso de vino”. Lucía al pasar los dos primeros niveles de la lista, continúa comiendo y charlando con sus tíos. Son las 11 p.m. y la tía Nidia ya está borracha, Lucía lee la tercera recomendación “Si la tía Nidia se emborracha llevarla lo más lejos del abuelo Mario y en caso de alcoholemia elevado acostarla de manera que se duerma”. Lucía asimila su fracaso cuando al levantar la cabeza ve que la tía Nidia le esta tirando vino en la cara al abuelo Mario. El abuelo Mario comienza a gritar, la abuela Nene lo tranquiliza y Lucía moviliza a la tía Nidia hasta el sector de la cocina. En la cocina está María sirviendo el helado, Lucía le dice a la tía Nidia que ayude a María. Por supuesto que Tía Nidia le pone vino a las copas de helado. Son las 11: 45 p.m. y el abuelo Mario comienza hacer chistes referidos a la tía Nidia; Lucía lee la cuarta recomendación “si el abuelo Mario hace chistes, esta de buen humor; si los chistes son referidos a la tía Nidia, está borracho. En este caso rezar”. Son las 00 horas el abuelo acusa a la tía Nidia de lesbiana, abuela Nene se quiere divorciar de abuelo Mario , Patán quiere comprobar que tía Nidia no es lesbiana y se la empieza a montar. Lucía se ríe, hace un bollo con la lista y la tira. Los fuegos artificiales comienzan a estallar, llega el 2010.
Para el modelo familiar no hay instrucciones específicas, evitar desastres en año nuevo consiste en no angustiarse y reírse un poco más. Para esto se debe comprender que a veces la realidad supera la ficción. Y que la gran comedia buscada en el cine, muchas veces está en una simple noche de año nuevo.
El modelo amistad, nace en el límite y vive después de éste. Sabiendo esto ¿Podremos atribuirlo al género border? Los amigos suelen encontrarse una vez cumplidas las 00 horas y cuentan con unas copitas de ventaja. Hasta este preciso momento todo se entiende, ¿qué desastre habría que evitar? Son amigos, festejando juntos la llegada de un año nuevo. Ahora, ¿por qué la reunión comienza con un “feliz año” y termina en vagos recuerdos?
La ansiedad con la que se espera la noche de año nuevo, la energía con la que se empieza y la resaca con la que se termina son el recorrido animal que los humanos llevamos. ¿Cómo se evita despertar en los brazos de una ex? ¿Cómo se le explica a una novia que fue engañada? ¿Cómo se le explica a un padre que su auto fue chocado? ¿Cómo se explica uno mismo que la cama esta pillada? Todas estas preguntas pueden ser analizadas a partir de la siguiente historia:
Supongamos que Manuel, soltero de 22 años, después de las 00 horas planea juntarse con el grupo de amigos de rugby. El club de rugby en el que juega queda en el barrio de Flores. Manuel, después de tomar vino durante la cena familiar, agarra el auto del padre y se escapa para la fiesta que organizan en el club.
Al mismo tiempo Lucía, soltera de 20 años, después de despedir al abuelo Mario y a la tía Nidia, decide llamar a su amiga Martina. Martina, soltera de 21 años, la invita a la fiesta que hacen en el club de su novio Juan Cruz. Juan Cruz, 22 años, juega en el club de rugby de Flores igual que Manuel. A Lucía mucho no hay que convencerla, ya que Manuel es su vecino y le gusta desde que son chiquitos. Martina, agarra el auto del hermano y la pasa a buscar a Lucía, cuando Lucía la ve llegar le dice “Estas loca, si se entera que te llevaste el auto borracha te mata”. Martina se ríe y poca importancia le da al comentario de Lucía.
Cuando llegan a la fiesta se cruzan los cuatro y se saludan: Martina y Juan Cruz se dan un beso en la boca; Lucía y Manuel se saludan tímidamente con la mano a pocos metros de distancia.
Durante la fiesta, Manuel y Juan Cruz toman cerveza sentados en una mesa con todos sus amigos. Lucía y Martina, sentadas en la calle de la puerta de la fiesta, toman tragos y charlan con otros varones.
Son las tres de la mañana los jóvenes están a mil revoluciones, bailan, cantan, gritan y siguen bebiendo alcohol. Los cuatro están dentro de la misma pista de baile, la música suena fuerte recibiendo el 2010. Entre risitas y saltos Manuel se le acerca a Martina y le da un beso. Lucía al ver esto, se le acerca a Juan Cruz lo agarra de la mano y se lo lleva al auto del hermano de Martina. Se dan besos en el auto hasta que el ruido de un puño contra la ventana los frena. Es Martina con Manuel. Juan Cruz por un momento se da cuenta la torpeza de su acto y de tanta vergüenza decide escapar, arranca el auto del hermano de Martina y avanza hacia la calle. Martina, al ver esto, le roba las llaves del auto a Manuel y los comienza a perseguir. ¡BAM! chocan.
STOP AND REWIND.
Dentro de este contexto hay varias cosas que se pueden evitar, y el evitarlas, evitaría el desastre anteriormente contado. Apuesto que el día después de año nuevo ninguno de los cuatro recuerda haber hecho lo que hizo, pero desgraciadamente si se acuerdan lo que hizo el otro. Para evitar éstos catástrofes hay que tomar una posición, una conducta, en pocas palabras un estado sobrio.
Mientras que el primer modelo nos enseña la comedia de evitar desastres en año nuevo, el segundo nos enseña la tragedia de no hacerlo.

miércoles, 14 de octubre de 2009

SINOPSIS DE UNA MUJER ASESINA

Nueva York. Un edificio en Manhattan, perteneciente a la central principal de la agencia de publicidad internacional EURO RSCG. El edificio tiene 5 pisos, los pisos están separados por área. El primero es el área de cuentas, el segundo de las duplas creativas para ATL y BTL, el tercero de Interactive, el cuarto de producción gráfica, audiovisual y digital, el quinto del Ceo, administración y recursos humanos. En el área de cuentas visualizamos una oficina moderna repleta de policías y médicos forenses rodeando dos cadáveres intactos en el piso de alfombra.
Los documentos de identidad encontrados en los bolsillos de los dos cuerpos recostados indican los nombres de las victimas: Marco Abramovich y Sarah Goodman.
Marco, se encuentra vestido elegantemente en perfecta blancura salvo por la tasa negra rota delante de él; Sarah, bañada en sangre y un revolver en su mano izquierda.
Las autopsias dan los trágicos resultados del hombre envenenado y la mujer con una bala dentro del corazón.
El FBI descubre que los documentos encontrados no solo son falsos si no que su nacionalidad es Argentina. Sus verdaderos nombres eran Nahuel Peres y Lola Allande. Llaman como único testigo a Teresa Malbrán, quien a pesar de no haber presenciado el homicidio, es la única amiga íntima que tenían Marco y Sarah. Teresa parece saber lo que ocurrió pero no quiso hablar con nadie hasta realizar su declaración.
Teresa, en la presencia de 3 oficiales, se ve obligada a contar por fin la realidad de los hechos. En el mismo momento que comienza a relatar lo sucedido la historia vuelve a su principio con la bandera celeste y blanca, en un colegio y quince años antes del siniestro incidente.
Nahuel y Lola se conocen de uniforme infantil haciendo la fila para saludar a la bandera. Entre miradas una más seductora que la otra, se enamoran apasionadamente uno del otro pero hay un amor más grande que ya creció entre ellos: la ambición del poder. Esta competencia, empieza por un simple conflicto de liderazgos dentro de su grupo de amigos. Su relación avanza a medida que crecen y se convierte totalmente dependiente de sus logros personales. Su sobre exigencia los atrae pero al mismo tiempo los destruye como pareja. Cuando terminan el colegio el ambiente entre ellos se torna violento y deciden terminar para el bien de los dos.
Al estar los dos desdichados por el fracaso de su amor, individualmente se proponen dedicarse a sus carreras, la cual los dos por diferentes motivos eligen Publicidad. Su profesión los distrae pero no les ayuda a olvidarse del otro, acá es cuando toman separadamente una decisión sin retorno. Los dos pasan por operaciones, cambios de identidad, religión y se mudan a otro país. Sorpresivamente terminan en el mismo lugar sin reconocerse; este incierto lugar es Nueva York.
Empiezan a trabajar en la misma agencia de publicidad, la oficina se parece al cuarto del homicidio pero mas limpio. Lola, quien ahora se llama Sarah es directora de cuentas y paralelamente Nahuel, quien ahora se llama Marco, es director creativo de las mismas. Se vuelven a enamorar, sin saber quien realmente es cada uno. Marco y Sarah van de la mano pero empiezan a sentir cosas extrañas y ciertas actitudes traen devuelta esas figuras del pasado que querían olvidar. Marco comienza a tener un amante, quien resulta ser Teresa, la mejor amiga de Sarah. Dentro de este escenario Teresa se da cuenta que Marco es Nahuel, y que su amiga de toda la vida llamada Sarah es Lola, quien no conoce en lo más mínimo. No soporta el engaño ajeno y propio, lo envenena a Marco y le pega un tiro a Sarah. Por temor a ir a la cárcel transforma la escena haciendo parecer que Sarah asesinó a Marco y luego se suicidó.

martes, 22 de septiembre de 2009

La necesidad de hablar

Chaplin decía: “Es mejor permanecer en silencio y parecer un tonto que abrir la boca y despejar toda duda”.
Respeto el silencio, entiendo a la gente que prefiere no opinar o subjectar pero no comparto sus ideales.
El escuchar y aprender son deberes impuestos desde un principio por la numerología de Dios al darnos dos oídos y una boca. Pero al haber entendido esto el diálogo luego viene a ser nuestra herramienta de diferenciación y expresión ante el resto.
La gente, por temor, prefiere callarse antes de caer en las Islas Bermudas; y el miedo es sólo una actitud cobarde que este mundo no se puede permitir.
Si nosotros no levantamos la voz por lo que creemos justo, nuestros principios nunca se transmitirán a nadie.
Todos nos consideramos lo mismo: una persona indiferente, inútil e incompetente como para lograr un cambio. Pero aunque no lo creamos posible todos tenemos algo para aportarle a nuestro país: Argentina.
Los argentinos somos personas brillantes, persistentes, inteligentes y resistentes. Pasamos por mucho: la represión del 76, el sufrimiento de los diferentes gobiernos (uno más denigrante que el otro), la recesión, la inseguridad, la pobreza, la falta de trabajo, y la infinidad de crisis tanto económicas como sociales. A pesar de todos estos golpes seguimos de pié, algo se debería rescatar de nosotros mismos como ciudadanos.
Voy creciendo, escuchando a mis padres, a los profesores, a mis amigos, a profesionales, a los distintos partidos y nunca nadie cambia la percepción que se tiene de Argentina. Vivimos aterrados esperando un cambio, que sólo nosotros podemos construir. Se que el pensamiento resulta un poco exitista, pero peor es depender de los resultados.
No hay que ser conformista y adaptarse a la mediocridad que nos ofrecen porque hay un camino mucho menos llano que éste. Intentemos dejar nuestros intereses personales de lado, y empecemos a votar en torno a los orígenes de la problemática. Presentemos cuestiones como la falta de educación o situaciones que NO pueden estar sucediendo como la gente muriéndose de hambre en el interior del país.
Estamos revolucionados por el asunto de la ANSES, Ley de Medios, etc. y el gobierno sigue invirtiendo nuestro dinero en convencer a la oposición; cuando debería estar en los proyectos culturales, universidades, escuelas, hospitales y fundaciones sin fines de lucro. ¿Acaso nos estaremos volviendo unos pretenciosos individualistas, por lo cual proyectamos un futuro de retrógrados?
Demos esperanzas a este pueblo, demostremos un poco de humanismo y contagiemos una sincera prosperidad.

lunes, 7 de septiembre de 2009

El Prejuicio al Colectivero

Av. Niceto Vega, Buenos Aires. Un conductor, ex escritor, manejando un 140 por su camino rutinario.

Escucho una bocina, abro los ojos y despierto en el primer asiento de un 140. El colectivo frena en su parada y al estar mi cabeza apoyada sobre la ventana, mis ojos me muestran a Virginia en la esquina de enfrente. Sus 20 años de edad no disimulan su ansiedad tan sólo por cruzar la calle y alcanzar a un simple colectivo que se repite cada 10 minutos.

Miro para adelante y veo el semáforo en verde, el cual no le impide a Virginia alcanzar el colectivo. Mientras los autos la esquivan, se le cae un portafolio que pareciera ser de cuero, estoy casi segura que pertenece a su trabajo. Mientras Virginia lo levanta, noto que efectivamente lleva el logo de una empresa. ¿Por qué estará tan apurada?, pienso que esta llegando tarde a su facultad, si no ¿por qué habría de correr?...

Sube descontroladísima y dirigiéndose a mí caminando atiende su celular. Al atenderlo veo que el modelo todavía no llegó a nuestro país. Virginia comienza hablar y pronto descubro que no entiendo ni la mitad de las palabras pronunciadas; mi problema es que nunca aprendí ingles y menos británico. Ahora empiezo a dudar que Virginia se llame así, sin ir más lejos las iniciales que aparecen en su cartera: S.G denotan más un nombre como: Sarah Goodman.

Entre la monotonía de su voz y que no le entiendo nada, Sarah me deja de interesar; prefiero encontrar alguien más en otra esquina. Por un segundo me distrae la cara de concentración del colectivero, uno a veces quiere creer que están pensando, pero no, es sólo la misma cara de orto que tienen todos. De repente me mira por el espejo, me pongo tan nerviosa que cambio la dirección hacia Sarah, quien pega un grito de violación tal como un: “WWWWHHHHAAATT”. La miro, veo que corta y se sienta en el primer lugar vacío que dejan, el cuál estaba reservado para una pobre anciana. Se desplaza sobre el asiento, arremangándose la camisa mostrando su calor y cansancio. A pesar de su pulserita de oro blanco con una pequeña cruz de Jesús, de católica no tiene nada.

Sarah no debe estar yendo a la facultad, sus elegantes botas Hunter me explican que debe haber estudiando en un Harvard y que se tuviera que estar tomando un taxi en vez de un colectivo. Si bien los colectivos son un transporte público, es de muy mal gusto que alguien de tanto estilo tenga tan poca educación como para robarle el lugar a una jubilada que cobra 500 pesos de pensión por mes.

En realidad por mucho que la observo poco puedo descifrar a donde esta yendo, de hecho parece desear hacia alguien más que algún lugar. Tiene cara de preocupada, como si un amante llamado Hércules se le estuviera escapando en un avión que ella jamás alcanzara. Debe odiar los aviones, si no viniendo del primer mundo ¿Cómo elegir quedarse en un país como este? Quizá intenta ser argentina, pero solo las mujeres verdaderamente bellas y listas podemos serlo.

El colectivo se frena, el chofer debería cambiar de turno con el que cumple el próximo horario. Sin embargo se baja y le dice: “¿Queres que te cubra hoy?, todavía no decidí cuál de las dos va ser la protagonista: la que ignora a la vieja o la que me ignora a mí”.

lunes, 13 de julio de 2009

Situaciones Incomodas

Como me molestan ciertas circunstancias de la vida donde por ejemplo:

Uno se cruza a un conocido, pero no tan conocido, ya que una vez cumplido el cordial saludo, surge la intrigante pregunta: ¿De qué le hablo? Y ahí comienza el nefasto diálogo:
- ¿Todo bién?
- ¿si vos? ¿estás estudiando?
- Si Publicidad, ¿vos?
- (sin saber si preguntar algo más sobre su estudio o responder lo anteriormente preguntado) Ah ¿enserio? Y ¿en dónde?
- etc.
Vamos a misa y en el momento del saludo de la paz, empezamos a chocarnos entre nosotros porque no sabemos si darle un beso al de al lado, al de en frente, al de atrás y el terrible cuestionamiento de ¿a este, le doy o no le doy? Porque capaz le voy a dar y el justo le va dar a otro.
Vas al doctor, esperas tu turno, hasta que el doctor pronuncia tu nombre y te hallas en su puerta sin saber si saludarlo con la mano, con un beso, o ¿con qué?? Es simplemente un humano porque carajo existe esa pregunta siquiera.
Una te pregunta: “¿me bancas en un preboliche con los amigos de Tato? (el chico que le gusta) y resulta que en el momento del acto el hijo de puta de Tato te tira un chamuye a vos y adelante de ella. Y cuando no sucede esto, pero por el contrario nadie se habla y sólo pensás por a dentro "Por favor que Pepita rompa el hielo". Pero claro cuando Pepita rompe el hielo, tenés que lidiar con que rompa cualquier tipo de código.
¿Y cuando dijiste algo que no tendrías que haber dicho? Y justo en ese fucking instante que está saliendo de tu boca ya te diste cuenta de la dimensión de tu error. Lo peor de eso es cuando todos te miran fijo, y a vos te dan ganas de decirles: “ya me di cuenta hermanos, dejen de mirarme”.
El silencio. Dicen que lo explica todo, pero realmente cuando sucede, ¿no te dan ganas de morirte? ¿Desaparecer? ¿Simplemente no estar…?. Y dentro de esta categoría se encuentra por supuesto aquella pregunta que nunca te contestaron y convivís eternamente con la duda de si te habrán escuchado, o si fue una boludéz haberlo preguntado en primer lugar.
¿Alguno de los que está leyendo esto trabaja? Y en ese caso ¿no es un parto la situación donde uno tiene que pedir permiso para “algo” donde ese algo signifique estar ausente? No sé ustedes pero yo la paso como el orto. Dejás pasar los días, y cada día donde decidiste pedirlo, lo dejás para lo último. Hasta que te encontrás en el borde del tiempo estimado para realizar el pedido (un día antes del día que debes realizar ese “algo”). Entonces, vas con las bolas en la garganta y finalmente cuando lográs que las palabras salgan de la cárcel, te dicen: “¿Por qué no me avisaste antes? Esas cosas me las tenés que decir con anticipación….”
Si alguna vez hiciste dedo debes entender lo feo e indescriptible que es cuando te levanta alguien que no esperabas o que no buscabas o que NO QUERÍAS!!!!
¿Y cuando lo hace alguien que no te habla? Nuevamente la presencia del silencio.
Estás viendo una película con tus papás o con alguno de los dos, y aparece una escena de sexo y pensás por favor que se corte la luz o que se cambie de canal. No necesito aclarar lo terrorífico que es cuando el momento lo comparte también tu novio.
Mandar un mensaje de texto a un destinatario equivocado, y darte cuenta que lo mandaste recién cuando te lo contestan, y el que te lo contesta es justamente el protagonista del mensaje.
Cuando hablas mal de alguien con una persona y esa persona es la prima, la hermana, o la novia y no encontrás un hoyo suficientemente “enorme” como para meterte adentro.

Y pensar que estos son solo ejemplos ¿no?

martes, 23 de junio de 2009

Fernando Peña

Hay personas que dedican su vida al servicio de comunicar lo que un medio exige, hay otras que comunican la verdad. Existe un pequeño porcentaje de seres humanos que no están limitados bajo ningún poder más que su propia conciencia, y dentro de éste se encontraba Fernando Peña.

23 de Junio de 2009, pasaron 6 días de la muerte de este polémico personaje, y a pesar del impacto causado, hoy ya lo olvidaron….

Recuerdo el momento exacto que me enteré, y memorizo también como todos los programas comenzaron a hablar sobre él. Sin embargo hoy trato de verlo, y ya nadie lo muestra, pareciera que Peña equivale a una noticia vieja.

El otro día una amiga me decía:”El mundo necesita personas como Fernando Peña”, y yo pienso cuanta razón tiene, ahora: ¿Quién va hablar por nosotros?. Soy consciente de sus contradicciones, de hecho era una persona totalmente controversial; pero como decía él: “¿Ahora nos van a quitar el derecho a cambiar de opinión?”.

Fernando nos acompañaba todas las mañanas, sus monólogos nos despertaban y en sus entrevistas nos provocaba. A él no le importaba el modo de llegar a nosotros, el tan sólo llegaba…

¿Era mal educado? Sí, era mal educado, pero por lo menos imponía principios distintos a lo que la gente esta acostumbrada. Sus ideales iban mucho más alla de este mundo estratégico y estructurado. Se peleaba en cámara y no le importaba, porque no le cambiaba en lo más mínimo lo que los demás opinaban.

La única razón que le encuentro a su muerte es, que se fué habiendo dicho y hecho todo lo que deseaba. De todo lo realizado solo quedaron restos, y me pregunto quién será el sucesor en recogerlos.

Hoy me preguntaron para qué seguía flagelándome con videos donde él hablaba, y la respuesta es que todavía tengo ganas de escucharlo. Nunca lo fuí a ver al teatro, yo en verdad creí que iba haber tiempo….que ingenuidad la mía, o la de muchos al dejar siempre las cosas para un “más adelante”.

viernes, 12 de junio de 2009

Los únicos inocentes son los perros

Las relaciones humanas son complicadas, cuanto más se intenta comprenderlas más inseguras e inestables se consideran. Ya de por sí la relación con uno mismo es difícil de establecer, un día a la mañana te despertás considerándote lo mejor que creo Dios en este mundo y esa misma noche simplemente te detestás con todas tus fuerzas. Ese vínculo de amor y odio que se genera entre la persona y su yo mismo, se refleja con los demás haciendo notar sus defectos y virtudes.

Existen relaciones sanas y enfermizas pero solo algunos descifran cuales son las correctas. Las relaciones familiares sirven como signo de marca en el ser humano, pero es una marca la cual sólo la audiencia observa sin que siquiera el organismo se de cuenta que la lleva. Esa audiencia que logra entre leer los valores propios de la marca, lo hace sin considerar su historia al no conocerla. Un individuo pasa a ser solamente una identidad marcaria, donde su esencia es descubierta por unos pocos.

Entonces el mundo se va completando de relaciones imitadas fraudulentamente de otras marcas. Y así como hay algunas más complejas que otras, las relaciones se tornan difíciles e intolerables. Se empieza a distinguir el yo que muestro con el yo que soy, y las calles se transforman en galerías de nuestra exposición.

Dentro de toda esta locura, una mujer se frena en una de las vidrieras del hogar, sólo para observar cuan grande se torno su vanidad. Se para detrás de ella una ex amiga y en el contraste de la imagen propia y la ajena se encuentra algo en común: el perro que se compró a medias cuando eran pequeñas. Las dos mujeres lo quieren pero entre ellas no pueden cuidarlo porque se pelean cada vez que lo intentan. El perro crece sin entender por que no se puede distinguir las relaciones externas de su relación individual con cada una de ellas. “Somos marcas diferentes” explican ellas, y el perro solo se pregunta que tipo de marca será el.

Los humanos sufren un vacío provocado por la heterogeneidad marcaria , mientras que los caninos recién comienzan a estudiarla. ¿Los hombres se encuentran avanzados o frustradamente equivocados?.